sábado, 5 de noviembre de 2011

Os quiero golfas

Desde que éramos niños, nuestros padres nos enseñaron a dar las gracias. Al principio por un juguete o algún caramelo. Ahora que ya somos mayores solemos dar las gracias por un buen consejo o simplemente por una sonrisa. Las cosas buenas que pasan a lo largo de nuestra vida, siempre quedarán en nuestra memoria. Por eso quiero dar las gracias al destino por haberme permitido conocer una persona como tú. Una persona sencilla, única, maravillosa.







No hay comentarios:

Publicar un comentario